El níscalo, robellón de nombre científico Lactarius
deliciosus, es un hongo comestible, muy común en España, crece en
pinares húmedos y bosques mixtos.
Su seta, o cuerpo fructífero, aflora
en otoño, y es muy apreciada en nuestra gastronomía.
Es consumida asada, guisada, plancha, o como
complemento de los guisos de carne
Níscalos o robellones al ajillo con jamón |
Ingredientes:
1 kilo de níscalos fresco
3 dientes de ajo
250 gr de jamón serrano
perejil
aceite de oliva .
sal
Elaboración:
Limpiar las láminas del níscalo con un cepillo o
brocha suave,
Quitando todo el verdín posible y si fuera
necesario si están muy sucios lavar al chorro de agua fría o incluso ponerlos
en remojo y lavarlos bien
níscalos frescos |
cortamos el tronco y dejarnos escurrir en un
colador y después secamos con un paño suave.
en cazuela con un chorro de aceite doramos los
dientes de ajo picaditos
Se le puede poner medio vaso de vino blanco antes de
agregar el en este caso damos un hervor fuerte un minuto y luego
bajamos a fuego mínimo hasta terminar la cocción.
cocinar con tenedor de madera mover lo menos posible
para que no se rompan.
Es rico en fibra, lo que favorece el transito intestinal, se recomienda tomar con precaución los que padecen de enfermedad intestinal y insuficiencia renal leve y acido úrico ya que contienen purinas.
Valor nutricional (por 100 gramos)
Calorías: 14 kcal
Proteínas: 1,89 g
Fibra: 6,89 g
Grasas: 0,67 g
Potasio: 310 mg
Hierro: 1,3 mg
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